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CARACTERÍSTICAS GENERALES
El Gran Boyero Suizo es un perro moloso de trabajo, de gran tamaño, majestuoso, imponente y disuasivo, a la vez que incomparablemente amante de los suyos.
Usado antiguamente para proteger ganado y carnicerías (llamado “el perro del carnicero") debía ser capaz de resistir al frío de las noches nevadas, al dolor, hacer uso de su coraje y sobre todo poder discernir por sí mismo un peligro y ser capaz de actuar en consecuencia.
Estas características esenciales no se pierden y deben ser considerados al momento de elegir un Gran Boyero como parte de la familia. Su tendencia a la toma de decisiones puede hacerlo ver como un perro testarudo, pero comprendiendo de dónde proviene y a qué está enfocado, el ideal es orientar esta característica para promover su lado vigilante y guardián, nunca agresivo. Y dentro de esta comprensión de su temperamento, dejar al perro sacar su mejor potencial: la excelente combinación de devoción por los suyos, cariño por quienes son bienvenidos y desconfianza del desconocido.
El Gran Boyero Suizo no tiene miedo, no retrocede frente a amenazas y se comporta como perro “barrera" cuando corresponde disuadir. No es un perro de ataque ni agresivo.
El enorme amor que tiene hacia su familia lo hacen llegar al límite de la dependencia. Esto también debe ser considerado antes de incorporar uno de estos perros a la familia. No soporta la soledad, puede generar hábitos ansiosos o verse debilitado su sistema inmune, por lo que no es apropiado para personas que están demasiadas horas o días fuera de la casa. Este perro necesita, por sobre todo, la cercanía de quienes ama, dedicación, compartir tiempo de calidad con sus humanos y una vida cotidiana de respeto. Frente a este tipo de atención, el Gran Boyero Suizo responde sacando su mejor potencial y puede ser el mejor “babysitter", incomparablemente tolerante a la manipulación (razón por la que es utilizado cada vez más como perro de asistencia y terapia en Estados Unidos y recientemente también en Europa).
El Gran Boyero o “Swissy", es un perro rústico, que ha conservado sus características físicas gracias al cuidado de los criadores responsables que se han preocupado de mantener su aspecto físico con el fin de conservar sus cualidades y su salud. Su cuerpo potente le permite cargar bastante peso y a la vez tirar hasta 20 veces su propio peso. Esta capacidad de tiro se utilizaba antiguamente para usarlo como “el caballo del pobre" y repartir leche transportada en carretas. A veces un solo perro o a veces varios, tiraban de estos carros antiguos cargados con bidones. Es importante tener en cuenta que, dada esta enorme fuerza de tiro, el Gran Boyero Suizo no es un perro que deba ser paseado con arnés, ya que éso solamente fomenta su intención innata de tirar. Por el contrario este perro debe ser enseñado desde su más temprana edad a distinguir cuando queremos realizar un trabajo de tiro con él a cuando es un paseo normal donde no debe tirar de la correa. Este perro no responde a la educación por la fuerza, ya que siempre perderemos, él siempre será más fuerte. No responderá adecuadamente a la educación por castigo. Sin embargo el Gran Boyero actuará exactamente como se le pida apelando con cariño y respeto a su primer y gran deseo: COMPLACERTE.
Es un perro deseoso de pasar tiempo contigo, de realizar actividades juntos y de hacer el trabajo que le pidas, que puede ser incluso, por contradictorio que parezca, simplemente compartir un sofá en plena calma (que puede llegar a ser una de sus actividades favoritas, por lo que se les llama “velcrodog": siempre muy cerca tuyo).
Aquí les dejamos algunos datos puntuales antes de elegir a un Gran Boyero Suizo como parte de la familia:
• Es una raza grande a gigante: hasta 72 cms a la cruz y hasta 60 o 70 kilos de peso los machos adultos (como referencia, esto es el doble que el peso de un pastor alemán). Las hembras son considerablemente más livianas, pero rara vez pesan menos de 45 kilos en su edad adulta.
• Necesita mucha atención diaria, por lo menos un paseo que implique 3 aspectos: estimulación de olfato, promoción del vínculo afectivo, desarrollo y mantención de musculatura para sostener su gran esqueleto.
• Comen mucho, sobre todo en etapa de crecimiento. En alimento seco y dependiendo de la calidad del mismo (que debe ser de muy buena calidad para asegurar un correcto desarrollo físico y prevenir posibles cojeras, displasia etc.) puede llegar a comer alrededor de 800 gms al día, siempre dividido en al menos 2 raciones (separadas de unas 10 horas).
• El gasto de mantención es elevado, por su alimentación, chequeos veterinarios, juguetes seguros adaptados a su mordida, camas XXL, comederos y bebederos grandes, etc. Todo lo referente a la vida de un perro grande es mucho más caro que mantener a un perro de talla pequeña.
• Necesita ser educado y sociabilizado desde su más temprana edad y ésto requiere tiempo, paciencia, dedicación e idealmente el apoyo de un educador canino que principalmente enseñe a la FAMILIA a comprender al perro para darle lo que necesita, en la justa medida de libertad y respeto como perro, además de promover conductas para la propia seguridad del perro y eventualmente de niños o personas mayores: No dar saltos de efusividad, responder al llamado, no tragar algo peligroso.
• Pueden verse afectados por enfermedades o condiciones caras de tratar o emocionalmente desgastantes, la mayoría comunes a razas gigantes y otras específicas: displasia, epilepsia, licky fit, esplenomegalia, problemas oculares (entropio, ectropio, distiquiasis), alergias, dilatación y torsión de estómago, hemorragia post operatoria, golpe de calor. Su esperanza de vida no es mayor a 12 años, siendo el promedio 9 años. La mayoría de las enfermedades mencionadas pueden prevenirse pero nunca se puede asegurar que no aparecerán.
• No son aptos para vivir en espacios muy pequeños.
• No son aptos par deportes de rápido desgaste aeróbico (actividades de velocidad como jogging). Contrario a una alta resistencia en tiempo prolongado (senderimo o trekking sí)
• A pesar de su pelo corto, sufren con el calor. No se recomienda realizar actividades en horas de calor en verano.
• Cambian el pelo junto con los cambios de estación, variable según el lugar donde vivan. Los perros que viven dentro de la casa pueden botar más pelo y es notorio.
Y ahora les confirmamos algunas caracterísiticas que son probablemente las que los han llevado a buscar esta raza:
• Guardián
• Leal
• Valiente
• Amante devoto de su familia
• Incomparable cariño hacia los niños
• Estoico
• Resistente al dolor de forma inusual
• Increíble capacidad de recuperación frente a dificultades
• Versátil
• Poca mantención (basta con un cepillado de vez en cuando)
• Estable (no da sorpresas)
• Equilibrado
• Afecto a poquísimas enfermedades en comparación a razas menos rústicas, más manipuladas por el hombre
• Alegre disposición al trabajo
• Compañero fiel
• Y POR SOBRE TODO, UN PERRO CONFIABLE, INCORRUPTIBLE
CONCLUSIÓN
Frente a varias desventajas o lo que se pueda ver como defecto, las características de un Gran Boyero Suizo harán que el tremendo amor que provocan en nosotros cambien nuestra vida para siempre y veremos siempre la balanza a su favor. Sin darnos cuenta, adaptaremos o cambiaremos muchas cosas que nunca pensamos al sorprendernos con sus cualidades únicas. Todos nuestros paradigmas cambian cuando convivimos con un Gran Boyero Suizo.